Efemérides

1 de febrero: Nace Norman Rockwell (1926)

jueves, 3 de julio de 2008

Verano Azul

Hay un señor en Internet que se ha comprado una bicicleta (http://alexliam.net/2008/07/01/esta-bici-me-la-habeis-pagado-vosotros/).
Esto sin duda se debe a que él tiene fieles como dios manda, y no unos lectores que lo despachan a uno en plena encuesta con que se corte el pelo y se busque un trabajo y que si Cáritas y leches. Así no vamos a ningún lado. Yo, por lo menos, que no tengo ni carné de conducir (a diferencia del ciclista arriba mentado). Serán ustedes seguramente de los que disfrutan del espectáculo callejero del saltimbanqui de la Plaza Mayor, pero al terminar y decir él muchas gracias, no le ha dado tiempo ni a terminar el -cias cuando ustedes ya han llegado al MacDonald's, huyendo de la consecuente propina. Hm.

En fin, despechos aparte, mis estimados súbditos, me veo hoy de nuevo comminada a proceder a la epístola por el tedio, que está aquí sentadito otra vez a mi vera, venga y dale pegándole a la ñ en el teclado y yo que no que te estés quieto que qué pesao joé con el puto tedio a ver si para quieto. Un sinvivir.


¡Estuve el fin de semana pasado en Barcelona! Fui, como ya ha apuntado Jafuda, a descubrir un asesinato. Concretamente, el que encontráis en la columna de la izquierda, apartado "recomendaciones - la tremolina sugiere". Me está entrando no sé qué al pensar que voy a quitar a los Accidents Polipoètics para alabar esto, pero bueno: renovarse o morir, o nunca seré una abanderada de los bites -ni me compraré bicicletas-.

Decía: que descubrí al asesino, que perdí una oportunidad de oro para darme con gozo a la usura y sacar al menos una cena gratis del que me acompañaba, que no entiendo por qué mi asesino era el menos votado de todos si pa mí que estaba clarísimo, y que qué miedo, si extrapolo esa pequeña muestra del juicio de la población a poblaciones más amplias (todo el sistema criminalístico, por ejemplo).

En otro orden de cosas, diré que por vez primera en mi vida, después de 10 años de incansable esfuerzo, logré pernoctar en Barcelona en un sitio que, por menos 60 euros la noche, no llevara adjunto yonkis que interpretan coplas a las 3 de la mañana por el patio, o pinochetistas de importación que regentan frías pensiones, o paredes con boquetes (pa hacer amigos con los de al lado) y váteres atascados. ¡Ay, qué experiencias me ha brindado la Ciudad Condal en este último decenio! Experiencias que se han acabado gracias al aceptable hacer de este mi último hotelhostalaparthotel descubierto. ¡Y en pleno centro!
¡Con camas que no chirrían!

Qué más he hecho en Barcelona. Hm. Me he engaudiniado, lógicamente. Qué vicio. Y me he asado de calor, como ya sabéis. También he vuelto a confundir la esqueixada con la escalivada, y por su parte el que me acompaña ha intentado hacer un master en gazpachos. Misión abortada por escasez de tiempo: nos hemos quedado en diplomatura.

¡Y, por primera vez, he entrado en el Poble Espanyol! Tengo una sugerencia sobre este particular: propongo cambiarle el nombre por "el Poble Castellà con deconstrucción de andalucismo charnego". Pero me ha gustado, sí señor. Pese a que el plato típico de Ávila sea el Paellador. Lo mejor: un gato canela que mora por esos lares, y una tiendecita de churrimaquis ornamentísticos artesanos (artesanos de verdad, no de las franquicias peruanas de las salidas de metro), ya sabéis: pendientes, pulseras y antojitos semejantes. Eso sí: preparen la billetera y el seguro de vida de la abuela antes de entrar.

Pero volviendo al tema de los ciclos, no quiero despedirme sin antes hacer la ola, una vez más, a la inventiva, inciativa y capacidad de puesta en marcha catalana en general y barcelonesa en particular. En Madrid hemos decidido asolar los hospitales de paliativos. En Barcelona han decidido solar las calazadas con carril-bici. Y no contentos con eso, han plantado un servicio de alquiler de bicicletas con sus puntos de recogida y demás semi-gratuito. Funciona con un carné (creo que es anual) de un precio cuasi-simbólico. Este carné te permite coger las bicis de los puntos-bici, desplazarte hasta donde quieras, y dejar esa bici que has cogido en el punto-bici más cercano. Y así ad infinitum.
Declaro así una vez más públicamente mi amor por los barceloneses, y hago un llamamiento a cualquiera que tenga uno en stock. Si me hacen un buen precio, estoy dispuesta a negociar sobre mi dote.

5 comentarios:

Jesús dijo...

Esto parece cosa de mal sincronizamiento...

Justo el fin de semana anterior pasé yo por la ciudad condal! y certifico lo del calor.

Creo que desde que estoy por latitudes más frequitas, mi tolerancia al calor se está resintiendo.

De todas maneras, señorita T., avise con antelación si vuelve usted por esos lares a ver si coincidimos!

Saludos!

Anónimo dijo...

Si señor, estoy de acuerdo contigo los catalanes con su sentido práctico e innovador siempre van por delante, nos guste o no; y yo aunque madrileña de pura cepa siempre les he defendido; además me gusta la idea de las bicicletas de "tomar y dejar".
AH! bonita podias haber encontrado ese hotel centrico, barato y aceptable hace dos años ¿no?.
Por cierto yo he estado en la Expo-Zaragoza y si alguién está pensando en ir; que lo diga y podré darle "unos consejillos útiles" para el buen funcionamiento in situ.
Ciao guapos.

Jafuda Cresques dijo...

Señora Tremolina,

Efectivamente, el fin de semana pasado fue terrorífico en lo que temperaturas se refiere. Fíjese, después de una abundante y excelente zarzuela de pescado (rape, bacalao, sepia, gambas, almejas y mejillones) no fuimos capaces de soportar el calor de la calle, así que tuvimos que refugiarnos en casa y apoltrornarnos debajo del aire acondicionado. La próxima vez le recomiendo a Usted que se esconda en un Corte Inglés o bien en algún cine para sobrevivir al calor extremo.

Avíseme cuando vuelva a Barcelona (supongo que tendrá ofertas para regresar, ahora que se ha ofrecido a negociar su dote), le recomendaré un par de restaurantes que no debe dejar de conocer...

Cuídese,
Jafuda

Anónimo dijo...

No sé de qué te quejas, porque en tu blog no hay ningún anuncio de casinos que te paguen por poner. A menos que la casa fabricante de Gusiluz te de una comisión y nos hayas colado el muñeco con intenciones subliminales comerciale e, ingenuos de nosotros, no nos hayamos percatado.

La Tremolina... dijo...

:-)

Pues ni te cuento los fabricantes chilenos de masturbadores...