Es enfermizo. Estoy convencida: debe de ser algún tipo de enfermedad nueva (y por ello, eso sí, quizá fardona: como cuando a "estar de los nervios" se le empezó a llamar "depresión"). El caso es que no me lo explico, no me lo explico. Es el ansia, el ansia arrebatadora, el ansia agónica pero inquebrantable, el ansia incapacitante, el ansia a la que tarde o temprano hay que escuchar y obedecer sus deseos. Yo no quería, juro que no quería. Durante meses me he estado reprimiendo. Pero al final ha sido inevitable.
He abierto otro blog. Como es gratis. El día que las amenazas de hotmail et alteres dejen de ser bromita para ser verdad, me encontraré con un serio problema, pero mientras tanto, sólo puedo decir que he abierto otro blog.
Nace de mi espíritu decimonónico de arrojar guantes a punteras de zapato ajenas, y la impotencia que me produce que esas punteras reaccionen meneándose un poquito y pisando sobre el mentado guante para seguir su camino. Pues yo en algún sitio tendré que volcar la nube gris llena de símbolos con espirales, exclamaciones y calaveras propias de Mortadelo que me nace en esas situaciones. Y como a cada cual lo suyo, ese sitio no puede ser La Tremolina, que versa de otros ánimos.
Ya ven que no quedaba más remedio. Ha nacido El Consumidor Implacable.
El Transmongoliano
Hace 11 años
3 comentarios:
A visitarlo
Bueno, no es exactamente el gastroblog que se le demandaba, pero habrá que conformarse...
Primero te ponen unos banners que tapan toda la pantalla cuando lees el periódico.
Luego te meten un anuncio antes de los vídeos de publicidad.
Finalmente la tremo hace un entrada publicitaria para otro su blog...
Estoy muy decepcionado del virulento control del sistema capitalista que avanza y domina la libertaria red que nació siendo puramente anarquista. :-P
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